Los incas
Incas
Aproximadamente
desde 1432, con el gobierno del noveno monarca Pachacuti, en los territorios
andinos se potenció y desarrolló el imperio más extenso y mejor organizado de
toda la América precolombina, tanto por muchas de sus impresionantes formas
culturales, como por los expansivos y decididos designios bélicos, mediante los
cuales el estado Inca impuso su personalísimo y práctico sello cultural, en
casi todo el cono sur americano, después denominado Tahuantinsuyo. La base de
esta compleja y nueva sociedad, se centró en una economía, derivada del
rompimiento de las montañas, en las que se construyeron y rehabilitaron andenes
o terrazas escalonadas, pantanos y canales, desde las faldas hasta las cimas.
Esas colosales obras agrícolas sólo pueden ser comparadas hoy con las
efectuadas por los egipcios y mesopotámicos en la era antigua.
El
estado inca abarcó una vasta parte de la América del Sur occidental, a lo largo
de la gran cordillera andina desde Ecuador en el norte hasta la meseta
boliviana y Chile en el sur. Pero, el imperio mismo era nuevo y todavía
políticamente inestable, habiendo sido formado solamente durante el décimo
quinto siglo
Economía
Además
de valles y llanos cultivados, 15 también las laderas de las montañas secas y
rocosas en que se construían terrazas o andenes agrícolas. Desarrollar esto
implicó un trabajo intenso que implicó la construcción de muros de contención,
relleno de espacios vacíos con piedras o arena en la base y la parte superior
llenada con tierra fértil transportada de otras zonas. El éxito de las cosechas
se garantizaba por medio de andenes irrigados por medio de canales que
recorrían varios kilómetros desde su captación en manantiales, ríos o lagos. El
maíz y la papa fueron los principales cultivos que sostuvieron a la población.
La base de
esta compleja y nueva sociedad, se centró en una economía derivada del
rompimiento de las montañas, en las que se construyeron y rehabilitaron andenes
o terrazas escalonadas, pantanos y canales, desde las faldas hasta las cimas.
Esas colosales obras agrícolas sólo pueden ser comparadas hoy con las
efectuadas por los egipcios y mesopotámicos en la era antigua.
Características Sociales
La base de la organización social
del Tahuantinsuyo estuvo en el Ayllu, palabra de origen quechua y aymara que
significa, entre otras cosas: comunidad, linaje, genealogía, casta, género,
parentesco. Puede definirse al ayllu como el conjunto de descendientes de
un antepasado común, real o supuesto que trabajan la tierra en forma colectiva
y con un espíritu solidario.
En el Imperio todo se hacía por
ayllus: el trabajo comunal de las tierras (tanto las del pueblo mismo como las
del Estado); las grandes obras públicas (caminos, puentes, templos); el
servicio militar y otras actividades.
El jefe del ayllu o curaca era
el anciano más recto y sabio, asesorado por un grupo de ancianos. Sin embargo,
cuando el peligro amenazaba, el mando militar lo ejercía un sinchi,
guerrero aguerrido y prudente, elegido entre los más fuertes del ayllu.
Religión
Los incas
adoraban al dios sol al que llamaban Inti, así como a la luna y
a los fenómenos naturales.
La cosmovisión andina
fue de carácter politeísta, animista y totémica. En los andes vivieron gran
cantidad de creencias, cada cual con un componente étnico. Se creía en la existencia
de tres mundos: superior (Hanan Pacha), medio (Kay Pacha) e inferior (Uku
Pacha); y en un dios creador Viracocha.
El culto
quechua, era presidido por el Inca, considerado hijo del sol y
asistido por los siguientes personajes:
El Sumo sacerdote inca,
llamado Willaq-Uma o Huíllac-Uma (en quechua: «cabeza de los presagiadores o
adivinos»), tenía entre sus funciones: presidir las ceremonias religiosas,
velar por la ortodoxia del culto, aconsejar al Inca, etc.
Las acllas: fueron
mujeres separadas de sus familias y dadas como tributo por las diversas
regiones del Tahuantisuyo. Por lo general realizaban labores al servicio del
Estado y la religión. Vivían en los Acllahuasis, edificios ubicados en
diferentes regiones del Perú. Destacan los acllahuasis del Cuzco
y Pachacámac.
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